Las universidades deben robustecer el sentido crítico y ético de las y los estudiantes
• Conferencia Cómo colaborar a reconstruir un mundo para la paz: los valores de la cotidianidad, de la académica Diana Oralia García Díaz
Ciudad de México a 11 de octubre, 2022.- Las universidades deben contribuir a robustecer la conciencia en sus estudiantes promoviendo valores como son el respeto, la paciencia y la responsabilidad, para formar personas íntegras, pues son los futuros ciudadanos que dirigirán a la sociedad, subrayó Diana Oralia García Díaz, académica del Área Académica 4: Tecnologías de la Información y Modelos Alternativos, durante la conferencia Cómo colaborar a reconstruir un mundo para la paz: los valores de la cotidianidad.
La académica sostuvo que las instituciones de educación superior no sólo cumplen con el rol de producir conocimiento, también son espacios donde el individuo adquiere un sentido crítico y una perspectiva ética, pero lamentablemente ésta última se ha olvidado con el tiempo.
“Piensen en sus propias vivencias, cuantas veces han visto a una persona destacada cognitivamente, con un grado de estudio alto, que ofende y hace bullying a sus compañeros o subalternos”.
García Díaz comentó que en un momento histórico como el que vive la humanidad, en el que está la posibilidad de una tercera guerra mundial, cobra fuerza la necesidad de fomentar valores, pues servirían para tener una convivencia más sana, al mismo tiempo que ayudarían al individuo a ser moralmente más educado, lo que repercute de manera positiva en el carácter de las personas.
La propuesta de la ponente, quien tiene un Master en Democracia y educación en valores en Iberoamérica, por la Universidad de Barcelona, España, y la Organización de Estudios Iberoamericanos, también busca que las personas pongan atención en los programas de televisión e información que ve en su tiempo libre.
Recordó que el aprendizaje social se da mediante la observación directa o indirecta de un suceso. Al entrar en contacto con programas con contenido violento, el cerebro aprende los patrones y comienza a generar comportamientos consientes o inconscientes.
“Al cerebro no lo podemos limitar –en– su aprendizaje cuando observamos algo. Si el protagonista de una serie tiene un comportamiento violento, para nuestra mente no es una ficción, cree que es aprendizaje y es algo que después se puede replicar, incluso pueden surgir comportamientos de manera inconsciente”.
García Díaz hizo hincapié en que estamos tan acostumbrados a la muerte ficticia (en los juegos) “que no nos alarmamos por los decesos ocurridos en la guerra. En otros tiempos esto no hubiera pasado así, esto es grave porque nos estamos deshumanizando”.
La ponente lamentó que en una época en la que las personas procuran no consumir grasas, colesterol o gluten para mantener un cuerpo sano, no se preocupen por lo que consume su cerebro.
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