La historia sirve como puente para dignificar la memoria y para reconciliarnos en el presente

• Nuestra universidad organizó el conversatorio Petición de perdón
por agravio a la comunidad china en México, en el
marco de las con-memoria-acciones
que lleva a cabo la SES

• Participaron los historiadores Pedro Salmerón
y Carlos Castañón, así como Adelina González Marín, de Conapred

Ciudad de México a 23 de mayo de 2021.- El Estado mexicano llevó a cabo una petición de perdón a la comunidad china en el país, al reconocer un hecho histórico y trágico en el que, sin consecuencia alguna, se asesinaron a por lo menos 303 personas del país asiático en Torreón, Coahuila hace más de 110 años. Bajo este marco, nuestra Universidad realizó un conversatorio para profundizar en el tema y reflexionar sobre el suceso.

En México se vivieron fuertes y recurrentes campañas anti China entre los años de 1905 y 1931, principalmente en Torreón, una ciudad construida por gente que llegó de otros estados, así como del extranjero.

Los hombres más prominentes de la comunidad china en esa localidad hicieron público su respaldo al gobierno de Porfirio Díaz durante la rebelión maderista. A principios de mayo de 1911, los rebeldes maderistas de la Laguna tomaron todas las poblaciones de la región. Luego de varios enfrentamientos, el 15 de mayo del mismo año algunos miembros de este grupo comenzaron a entrar a la plaza y unidos a los habitantes más pobres saquearon los principales comercios y perpetraron una terrible matanza de chinos.

Al restablecerse el orden y deslindar responsabilidades se contabilizaron 249 personas asesinadas de origen chino, no obstante, tres meses después, la legación del país asiático en México presentó los nombres de 303 víctimas. La masacre ocurrió en un contexto en el que tanto en México como en Estados Unidos y otros países de Latinoamérica se vivía un clima social de xenofobia y racismo contra emigrantes asiáticos y árabes.

Durante mucho tiempo no se habló sobre el tema; sin embargo, derivado de una serie de publicaciones y del trabajo en conjunto para gestiones con la comunidad china, para hacer un reconocimiento a la dignidad de la memoria, se logró que en 2007 las autoridades participaran con la embajada de esa nación asiática para hacer un acto de desagravio simbólico.

A 110 años de este fatídico episodio se hace necesario hablar de este hecho, pues son importantes las lecciones que nos da la historia, sobre todo porque nos advierte de los peligros que hay en el presente contra las minorías y el riesgo de ataques de grupos extremistas contra otros miembros de la sociedad.

La rectora de esta Universidad, doctora Rosa María Torres Hernández, recordó en el evento que la institución forma parte del subsistema de Educación Superior, por lo que está comprometida con el marco de las conmemoraciones que el Gobierno Federal impulsa acerca del año de la Independencia y la Grandeza de México. “Este evento que se conmemora debe conmovernos y llevarnos a establecer una relación diferente como humanidad, no solo como mexicanos”, afirmó.

Por su parte, el subsecretario de Educación Superior, Luciano Concheiro Bórquez mencionó que esta acción apela a nuestra memoria colectiva, “se trata de revertir las consecuencias de este tipo de formas de actuar, y comprometernos a que nunca más vuelva a suceder algo parecido”.

Durante el conversatorio, realizado de manera virtual, el historiador Pedro Salmerón habló del sentimiento antichino que ha existido en el país a lo largo de la historia, muchas veces generado por el propio gobierno, tal fue el caso del periodo porfirista.

Explicó que la comunidad del país oriental sufría del rechazo de las clases bajas de la región norte de nuestro país, principalmente por la propaganda racista difundida por el poder y por un repudio a lo extraño, a lo incomprensible.

Después de relatar la vida en ese periodo, subrayó que ninguna persona recibió ningún tipo de sanción por los actos, situación que debe dolernos como mexicanos; “debemos disculparnos”, sentenció.

Los discursos de odio surgen a partir del desconocimiento del otro

Otra de las invitadas a este conversatorio fue la maestra Adelina González Marín, directora de Promoción de Cultura y No Discriminación del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación, quien afirmó que la construcción de narrativas y discursos de odio surgen a partir del desconocimiento del otro y se sustenta en lo que se basa cualquier acto discriminatorio: estereotipos, prejuicios y estigmas.

Aseveró que la historia puede llevarnos a la reconciliación cuando aprendemos de ella y subrayó que en pleno siglo XXI es necesario llevar a cabo medidas de “no repetición” para que este tipo de tragedias no vuelvan a suceder. Una de las principales bases para dejar estos comportamientos atrás, argumentó, es comprender cómo opera el fenómeno discriminatorio que tenemos normalizado.

Por su parte, el maestro e historiador, Carlos Castañón Cuadros, director del Archivo Municipal de Torreón, expuso la forma en que este suceso trágico se ha vivido a lo largo de los años en la localidad. Aseveró que el hecho ha sido un tema tabú para la sociedad de la región e, incluso, se ha minimizado o justificado en algunos de los primeros textos sobre la historia de Torreón. Por ello, recalcó la importancia de este conversatorio.

“El evento de petición de perdón del Estado mexicano a la comunidad china es profundamente significativo, yo espero que una ceremonia de este peso simbólico permita a la sociedad y, sobre todo, a la comunidad agredida, sanar… La historia sirve también como un puente para dignificar la memoria y para reconciliarnos en el presente”, concluyó.

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